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may.
Logística esencial: El compromiso de abastecer y mantener en marcha el sistema productivo
La emergencia del COVID-19 ha mostrado como nunca la importancia de las cadenas de abastecimiento en todo el mundo. Especialmente en América Latina, el autotransporte de cargas se revela como un proceso fundamental para satisfacer las demandas de productos de alimentación, limpieza y salud, tanto a través de supermercados y tiendas físicas como en el canal online.
Específicamente en la región latinoamericana, el transporte automotor de cargas internacional también ha demostrado ser clave para mantener en marcha los procesos productivos, un factor fundamental para el abastecimiento y para conservar las fuentes de empleo y los recursos extraordinarios que requieren los estados para paliar esta problemática global.
Atentos a esta situación, dentro del contexto de cuarentena y aislamiento, es que los gobiernos de todos los países han exceptuado al transporte de cargas de la prohibición de circulación, conscientes de que sin estas políticas el impacto sería desastroso.
Incluso el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) ha puesto a disposición de los países de la región, líneas de apoyo para las pequeñas y medianas empresas del sector afectadas por la crisis, a la vez que señalan: “Nuestros análisis demuestran que es la combinación de medidas fiscales y financieras lo que mejorará las opciones de resiliencia del sector. Como nunca antes, el transporte necesita de acciones de política coordinadas que ayuden a su supervivencia”.
El comercio electrónico también es camión
La cuarentena ha hecho que millones de personas permanezcan en sus hogares, intensificando el uso de Internet para trabajar, entretenerse y también para comprar productos, que luego deben necesariamente ser entregados en los domicilios particulares de los clientes. Nuevamente el transporte automotor es el encargado de concretar estas transacciones comerciales, tanto mediante el uso de vehículos medianos y pequeños más indicados para la última milla logística, como con unidades más grandes para el abastecimiento a los centros de distribución, donde se desarrolla el otro eslabón clave de la logística.
Datos relevantes de este estado de situación ha brindado la consultora Kantar en su informe “Coronavirus: Cambio de hábitos de los argentinos en tiempos de pandemia”, donde precisa que “El contexto de pandemia abrió la puerta a la experiencia de compra online: 1 de cada 3 eshoppers probaron este canal por primera vez, y el 50% de ellos declara haber tenido una muy buena/ buena experiencia vs 71% de los más experimentados en el eCommerce”.
Transporte como sector clave
Es en este contexto que desde la división de transporte del BID, destacan la necesidad de que los estados aseguren la circulación del transporte de carga en cadenas de suministro esenciales, simplificando normativas y promoviendo la digitalización de todo proceso que requeriría contacto humano. Algunas medidas que recomiendan para la región incluyen:
- Realizar acuerdos internacionales para definir protocolos específicos de bioseguridad.
- Reformular protocolos de inspección y facilitar los trámites de comercio internacional para productos esenciales.
- Incorporar tecnología de bajo costo para la inspección de la carga.
- Eliminar restricciones a la carga aérea relacionadas a productos para atender la emergencia COVID-19, así como autorizar derechos de tráfico para vuelos de carga (donde no existen) y eliminar/reducir tasas operativas en los aeropuertos para tales vuelos.
- Finalmente, la facilitación del comercio electrónico y la logística de última milla promoviendo la coordinación con las plataformas de entrega existentes será fundamental para garantizar el acceso a bienes de primera necesidad.