25
jun.
Información técnica y comunicación estratégica, claves de una logística efectiva
Estos tiempos complejos ponen en valor aspectos de la gestión logística que muchas veces no son considerados en toda su dimensión. El rol de la comunicación entre la empresa y el operador logístico es fundamental para lograr operaciones ágiles y confiables, sobre todo cuando el contexto impone continuamente nuevos desafíos a superar.
La figura del operador logístico como socio estratégico es hoy más relevante que nunca. En escenarios turbulentos y cambiantes como los que vivimos actualmente, cada eslabón de la cadena de valor debe funcionar de forma coordinada para lograr la flexibilidad necesaria que demanda un contexto que cambia a diario, con nuevas reglamentaciones, tipo de cambio, normas de seguridad, protocolos, crisis económica y también malestar social, fruto de una pandemia que aun azota a todo el mundo y que ningún país ha logrado superar totalmente.
En este sentido la comunicación entre el operador logístico y el dador de carga se vuelve fundamental, en todas sus dimensiones. Por un lado es vital contar con información en tiempo real del estado de las cargas en tránsito, mediante una plataforma dinámica que permita el seguimiento para una coordinación efectiva que optimice tiempos y brinde rápida capacidad de reacción ante imprevistos.
Pero fundamentalmente es necesario en estos tiempos que exista una comunicación abierta y basada en la confianza entre el operador y la empresa para poder diseñar, desde lo estratégico, operaciones eficientes aún en estas circunstancias excepcionales.
Se trata entonces de un compromiso que no solo alcanza al operador logístico, sino que requiere por parte del dador de carga, la predisposición para compartir información de su negocio, siempre con el foco en optimizar los resultados a partir de un trabajo como verdaderos socios estratégicos.
Identificamos entonces estos dos pilares para una relación empresa/operador efectiva:
• Comunicación: Se deben definir claramente cuáles son los canales de comunicación adecuados entre empresa y operador logístico, donde se especifique el patrón de escalamiento para cada situación para evitar malos entendidos.
• Colaboración: Este concepto parece ser fácil de entender, sin embargo, es de los más difíciles de lograr, ya que debe existir una gran confianza en planear, diseñar, implementar y controlar procesos bajo un acuerdo común donde existe siempre actitud de ganar-ganar en las negociaciones entre cliente y el operador logístico. Es importante definir un esquema de revisión periódica de operaciones donde se puedan discutir aéreas de oportunidad entre el operador logístico y las empresas, y donde además se detonen planes de acción concretos para mejorar la operación y buscar no siempre el más bajo costo, sino la mejor rentabilidad del negocio.
Así entendemos en LTM la relación con cada cliente y sus necesidades, por eso pensamos en el largo plazo donde siempre ser más competitivos, brindando calidad y buenas prácticas, será el objetivo a alcanzar.